Por otro lado diferentes instituciones que apoyan el Día Internacional de la clase obrera, como el Director del Secretariado Nacional de Pastoral Social-Cáritas Colombiana, monseñor Héctor Fabio Henao Gaviria, precisó que se trata de una fecha “para reiterar el reconocimiento del legítimo derecho a la asociación y a la participación de los trabajadores”, además indicó que en Colombia esta celebración tiene lugar en medio de circunstancias “que hacen que miles de trabajadores y sus familias no conozcan el trabajo digno, sino condiciones marcadas por la baja calidad en el empleo, de su inestabilidad e ingresos insuficientes”.
La precariedad laboral y la informalidad cubre al 62% de los trabajadores colombianos, muchos de ellos mujeres y jóvenes. “La realidad de que cuatro de cada diez trabajadores no tiene garantizado el acceso a los sistemas de pensión y de salud se constituye en un reto para el desarrollo humano en nuestro país y, al mismo tiempo, un clamor a la solidaridad para que se tomen medidas prontas para resolverlo”, aseguran los directivos de la Pastoral Social.
Según cifras del Ministerio de Protección Social en 2010, sólo el 39% de los trabajadores tiene una relación laboral con la empresa para la cual presta sus servicios, el 13% trabaja en servicios domésticos o como jornalero sin tener ninguna relación contractual y el 48% es tercerizado.
Para Antonio Romero del Partido Socialista de los Trabajadores la tercerización es algo más que la reorganización de una cadena de producción, es todo un mecanismo de los empresarios para aumentar la explotación de la mano de obra y reducir los costos laborales, a través de figuras jurídicas por medio de las cuales contratan a destajo por cortos períodos de tiempo a los trabajadores, evaden su responsabilidad de aportar a la seguridad social y debilitan su derecho a la asociación. La tercerización es una manera de eliminar los derechos laborales y diluir la relación patrono/trabajador, suprime la estabilidad laboral e impide el derecho de asociación.
A este panorama laboral de tercerización y precarización laboral sigue en el país el asesinato de dirigentes sindicales. Este año a pocos días del Primero de Mayo, el 27 de abril, fue asesinado Daniel Aguirre Piedrahita, secretario general de Sinalcorterosa, así lo denuncia el Sindicato Nacional de Trabajadores del Sistema Agroalimentario (Sinaltrainal), señalando este acto “como política sistemática de violación al derecho de asociación y libertad sindical”.
Así transcurrió el Primero de Mayo en las diferentes ciudades del país
Nariño se moviliza
Más de dos mil personas salieron a las calles y colmaron la Plaza de Nariño de la ciudad de Pasto pidiendo la dignificación de su trabajo y condiciones de bienestar para sus comunidades; recicladores, centrales obreras, docentes, empleados del sector de la salud, la Marcha Patriótica, el Coordinador Nacional Agrario, Confluencia de Mujeres para la Acción Pública, campesinos y demás movimientos sociales y comunidades rurales y urbanas se encontraron para hacer de la plaza pública un festival de colores, aromas y arengas de toda índole; allí, en este escenario conformaron emblemáticas escenas de danza, zanqueros, música de papayera y parodias con muñecones de figuras gubernamentales que demostraban la beligerancia que a todos contagiaba.
Los recicladores exigían dignidad y respeto para su trabajo y reconocimiento por su labor social y ambiental; los trabajadores del carbón de madera arribaron a la ciudad para denunciar la persecución de que son víctimas por parte de Corponariño y la Policía Ambiental. También hubo en abundancia denuncias a la administración local, y entre “¡Abajo el alcalde cínico!”, “para el alcalde cínico, cínica protesta” y el “¡Predialazo!”, se evidenció la crisis social en la que se halla Pasto.
Las manifestaciones de inconformidad frente a las políticas del Gobierno nacional incluida en la agenda legislativa, reforma a la justicia, reforma tributaria y el rechazo los Tratados de Libre Comercio, los proyectos de minería a gran escala y se pide la salida de las multinacionales y transnacionales del departamento.
Culmina a la altura del medio día en medio de intervenciones políticas en la tarima de la Plaza que recogían las demandas de la gente y que se alimentaban del clamor general por una vida y un trabajo digno para las comunidades andinas del sur del país.
Agencia de Prensa Colombia Informa Nariño -Colectivo de comunicaciones El Churo.
Conflictos labores y necesidades básicas insatisfechas marcaron el 1 de mayo en la región Centro Oriente de Colombia
Este Primero de Mayo para la región del Centro Oriente tiene ciertas connotaciones que afectan la vida de sus habitantes en lo social, político, económico, ambiental y cultural, muestra de ello la movilización pacífica que adelantan indígenas y campesinos en Arauca contra las transnacionales petroleras, las afectaciones causadas por la ola invernal, la falta de agua potable en Yopal (Casanare), los atropellos y conflictos labores de Termosochagota en Boyacá y del Sindicato de Empleados de la Alcaldía de Saravena (SIDEMS) en Arauca y las recientes elecciones de las juntas de acción comunal.
En el marco del Día Internacional de la clase trabajadora la Emisora Comunitaria Sarare Fm Stereo 88.3 en Saravena exaltaron a la “gente de trabajo”
Las actividades desarrolladas por las organizaciones sociales y sindicales van desde programas radiales, jornadas de estudio, marchas y concentraciones en plaza pública donde denunciaron la situación por la cual atraviesan los trabajadores y trabajadoras.
Saravena-Arauca
En el departamento de Arauca las marchas se concentraron en Arauca capital y Saravena donde se desarrollaron manifestaciones de manera pacífica.
Por el contrario el Sindicato de Empleados de la Alcaldía de Saravena (SIDEMS) alertó a la comunidad para que estén atentos ante una eventual jornada de protesta contra la administración municipal, porque según lo expresado por los dirigentes sindicales les adeudan la dotación de 15 meses, les niegan los permisos sindicales para realizar sus asambleas, no se han realizado las gestiones correspondientes para el pago de las pensiones y el alcalde se niega a dialogar con el sindicato el pliego laboral de sus derechos adquiridos y contemplados en la ley.
Al finalizar la marcha en el municipio de Saravena el dirigente social Bernardo Arguello indicó que existen múltiples motivos para marchar y protestas entre ellos los derechos adquiridos de los trabajadores y en la región del Centro Oriente lo que ellos denominan la deuda social de las empresas petroleras.
Tunja (Boyacá)
Por Corporación Social para la Asesoría y Capacitación Comunitaria
El Primero de Mayo, día del movimiento obrero mundial, la capital del departamento de Boyacá fue escenario de movilización de aproximadamente 500 personas entre estudiantes, docentes, trabajadores en representación de sindicatos de la educación, FENTRABOY, TERMOSOCHAGOTA, Acerías Paz del Rio, SUTIMAC, la Central Unitaria de Trabajadores CUT-Boyacá, entre otros; quienes al unísono alzaron su voz en contra de las políticas laborales del gobierno del presidente Santos.
Las cuales han acentuado la flexibilización laboral a favor de las empresas multinacionales; de igual manera, se denunció los atropellos de los que están siendo objeto los trabajadores de TERMOSOCHAGOTA, los despidos masivos de trabajadores de la industria del acero; la entrega a operadores privados de hogares y jardines infantiles del ICBF; la campaña de desprestigio en los medios de comunicación contra el ICBF, con el ánimo legitimar la reducción y futura eliminación de los aportes parafiscales como se pretende con la Reforma Tributaria.
De igual manera, los trabajadores realizaron exigencias al Estado colombiano tales como: presupuesto para la educación pública que garantice la gratuidad y la de calidad; solución política al conflicto para la el logro de una paz con justicia social; en defensa del ambiente, los recursos naturales, el agua y la seguridad alimentaria del pueblo boyacense, se frene el aplastante paso de la locomotora minero energética y de las trasnacionales que ella trae. De esta manera, el pueblo boyacense, conmemora el primero de mayo, hace un homenaje a los Mártires de Chicago e invita a la unidad de la movilización como camino de reivindicación de su lucha justa y popular.
La Fiesta Obrera en Medellín
La histórica fiesta de la clase obrera se cumplió hoy en Medellín con una movilización multitudinaria, de más de tres mil personas. Esto, a pesar de que un sector de la CUT y la CGT en pleno habían decidido no salir a la marcha y esperarla mejor en el lugar de concentración, aduciendo que en la movilización habría grupos de jóvenes revoltosos que provocarían la reacción violenta de la policía. También hubo división en la marcha: una arrancó desde la cancha de Las Esmeraldas, en el barrio Manrique, periferia oriental de la ciudad, y terminó en el Parque de Bolívar, corazón histórico de la ciudad. La otra se desarrolló en torno a la comunidad del barrio Moravia, un sector histórico de la ciudad, donde la administración instauró el basurero, y donde hoy sus habitantes se movilizan contra el desalojo que les quiere imponer esta misma administración.
A pesar de esto, una enorme concurrencia animó de diversas maneras la movilización: hubo chirimías, zancos, mimos, escenificaciones, consignas y los indispensables cánticos con que el brío de los jóvenes estudiantes le irradian vida a todas las manifestaciones de los sectores populares.
Tal vez lo más destacado de la jornada fue el esfuerzo por vincular a la comunidad por donde la marcha pasaba, que salía a saludarla desde las aceras, ventanas y balcones, con las consignas, comunicados y, sobre todo, con el diálogo directo: todo ello en el despliegue de labor pedagógica sin precedentes. Desde los micrófonos, se le aludía con un lenguaje cotidiano en el que se hablaba de lo caro que está la vida, de las infamias de EPM que priva a los sectores más pobres de las servicios públicos domiciliarios, del problema del desempleo, de la salud, de la violencia, en fin, de todos los dramas que a diario enfrentan los habitantes de los barrios populares. También se abordó a la gente de forma directa, entregándole mensajes sencillos que explicaban lo que viene haciendo el Congreso de los Pueblos o la Marcha patriótica, de la necesidad que tiene la gente de organizarse para resistir a las políticas depredadoras del gobierno y de la forma de participar en estos movimientos que pretenden construir desde abajo un nuevo país para todos, con justicia y equidad.
En la marcha participaron todos los sectores organizados de la clase obrera, poniendo en el escenario de la movilización las diversas problemáticas que enfrentan los hombres y mujeres de los sectores populares y cuáles son hoy las iniciativas para transformarlas: desde los tradicionales sindicatos hasta la organización de vendedores y productores informales, pasando por organizaciones de mujeres, de usuarios de la salud, de jóvenes, pensionados, etc.
Informales, estudiantes y maestros
A la movilización del primero de mayo, que tradicionalmente es organizada y promovida desde las organizaciones sindicales, también se unieron los trabajadores informales. “Somos de Asoinformal y venimos a marchar porque nosotros tenemos derecho al trabajo y ahora nos están poniendo sensores en los buses. Además, los conductores no nos dejan trabajar y nosotros necesitamos nuestro trabajo. Por eso también marchamos”.
Ellos, los vendedores de fruta, los del tinto, los de los buses, organizados en Asoinformal, se animaron a movilizarse encima de una de las carretillas de todos los días y le gritaron a la ciudad que los trabajadores informales seguirán en contra del no-trabajar, del no-comer, del no-vivir.
En la calle estaban también los jóvenes y a ellos les escuchamos decir que “nosotros como Tejido Juvenil Nacional Transformando la Sociedad (Tejuntas) estamos marchando al lado del Congreso de Los Pueblos para reivindicar cinco puntos: la objeción por conciencia contra la militarización de la vida, por trabajo y estudio digno para todos los y las jóvenes, y por la cultura, la contracultura y el artivismo (arte y activismo)”. Mencionaron, además, que el activismo y el arte es la mezcla que escogieron para llevarle al país su mensaje de paz.
Por su parte, los estudiantes de diferentes universidades públicas y colegios, bajo consignas, clowns, chapolas, chirimía y mucha energía, volvieron a llenar las calles, no sólo para exigir el derecho a la educación, sino también para unir los esfuerzos hacia la construcción de una nación más justa para todos los colombianos y colombianas.
Desde muy temprano, en el barrio Manrique, organizaron sus tambores, narices rojas, pancartas, chapolas, con la idea de llevar a la comunidad el mensaje de que otro mundo sí es posible y que con acciones como las de hoy, llena de unidad y solidaridad, se puede seguir avanzando hasta construirlo. “Hoy gritamos desde las calles de nuestra ciudad y para el mundo que ser joven en Colombia no es un delito, que tenemos propuesta de nación para una vida digna, y que estamos dispuestos a seguir construyéndola junto con la clase popular”, afirmó uno de los estudiantes que participó en la movilización.
Pero también defendieron los estudiantes, junto con los profesores, su propia idea sobre la educación. “Nosotros como Identidad Estudiantil hoy marchamos porque sabemos que la universidad popular no la vamos a conseguir con la lucha gremial sino con la lucha de todo el pueblo. Porque para construir la educación se requiere un cambio de estructura social y política”.
Mientras tanto, los maestros de la Asociación de Institutores de Antioquia anunciaron que salieron a manifestarse “rechazando la política neoliberal que han venido imponiendo los gobiernos contra los maestros y los trabajadores, y para decirle al gobierno de turno que estamos inconformes con las políticas que vienen implementando”.
La lucha por la salud
En Colombia la clase trabajadora no sólo debe pasar por condiciones indignas de trabajo, salarios insuficientes y maltrato cotidiano, sino que, además, debe tiene un sistema de salud muy caro y sin calidad.
En general, la mayoría de las organizaciones y sindicatos que se movilizaron coinciden en que el sistema de salud en Colombia es negligente, y que la salida es que el poder popular mandate y decida sobre nuestra salud, no las empresas contratistas.
Eduardo Escudero, miembro del Sindicato de empleados y trabajadores del Sena- Setrasena, asegura que “a través de las prácticas jurídicas la salud ha sido violentada por la empresa privada (…) creando vicios administrativos para que el empleado sea burlado”. Agrega que “la salud es un derecho fundamental que debe ser atendido por el Estado, y por esto también estamos luchando en esta movilización”.
La Asociación Nacional de Pensionados de las telecomunicaciones, Sintraalimenticia, Sintravidricol, la Asociación de consumidores ecológicos, Sintracorpaul, Setrasena, Sintraunicol y Sinaltrainal comparten la idea de que, como aseguró Escudero, “la solución es hacer resistencia, como lo estamos haciendo hoy, para lograr cambiar el sistema”.
La policía impidió la concentración con gases
Llegando al Parque de Bolívar, ubicado en el centro de Medellín, las cosas se pusieron complicadas. A la altura de la Avenida Oriental con la calle Ecuador, El Escuadrón Móvil Antidisturbios- ESMAD cerró el punto de la marcha en donde iban los jóvenes; de inmediato sonaron las papas explosivas y el aire se llenó de gases, parecía que el objetivo de los Esmad era impedir la concentración en el Parque de Bolívar, punto de cierre de la jornada. Hicieron su aparición los tanques, el agua a presión y los gases.
Es posible que algunos jóvenes calientes en la parte de atrás de la marcha hubieran provocado a la policía. Pero lo que fue más obvio es que las tanquetas del Esmad esperaron la movilización en la desembocadura en la calle Ecuador, desde donde la arriaron por la retaguardia con distintas estrategias de provocación, hasta encerrarla prácticamente en el Parque de Bolívar, con la salida de Junín bloqueada por la policía, acantonada detrás de unas vallas. En varias ocasiones se vio a diversos agentes del Esmad, sin justificación evidente, lanzar papas explosivas, seguidas de granadas de aturdimiento y gases lacrimógenos. Algunos jóvenes se atrevieron a enfrentárseles, pero ante la arremetida de los gases, la mayoría terminó por huir y dispersarse. En medio del caos provocado, el Esmad persiguió y retuvo a varios jóvenes, justo los que menos preparados estaban para su arremetida.
Un joven, por ejemplo, casi un niño, fue atrapado por cerca de 10 hombres del Esmad; la gente gritaba que lo soltaran y un par de mujeres luchaban contra los policías para arrancárselo de sus manos. Otros manifestantes se atrevieron a apoyar a las mujeres y finalmente los policías retrocedieron y renunciaron al forcejeo, dejando libre al joven. En esos mismos instantes, algunos manifestantes apedrearon a la policía y fue cuando de entre la marcha salieron aparentemente heridos o afectados por los gases unos tres policías de civil, que corrieron hacia donde estaban los policías y de inmediato fueron atendidos por sus compañeros uniformados.
Pero a esta altura, el Esmad había logrado su objetivo: impedir la concentración. Y no sólo eso: a una cuadra del parque, y como consecuencia de los gases, una mujer adulta y un vendedor ambulante cayeron desmayados y tuvieron que ser auxiliados por los participantes de la marcha, que intentaban llegar al Parque de Bolívar y que pedían a gritos una ambulancia.
Aproximadamente a la una de la tarde terminó la actividad con una raquítica concentración en el Parque de Bolívar porque la policía y su cuerpo antidisturbios- Esmad hicieron un anillo en el que fueron cerrando varias cuadras alrededor del parque, con el fin de no dejar escapar a los manifestantes que se enfrentaron con la policía.
Pero no todo fue responsabilidad del Esmad
Después de la dispersión, haciendo un gran esfuerzo por resistir los efectos de los gases lacrimógenos, una de las chirimías siguió dando una fiesta musical que mantuvo cerca a un buen grupo de manifestante. Poco a poco, los que ya iban huyendo se devolvieron y la concentración cobró vida de nuevo, animados también porque, al parecer, la arremetida del Esmad había terminado. Pero la chirimía se cansó y la gente siguió merodeando por el lugar a la expectativa de qué programa seguía. Las centrales obreras, que se quejaban porque el Esmad no permitía que la gente se concentrara en el parque, tampoco había organizado un programa cultural y político para mantenerla allí. Al ver que realmente no había ningún programa que convocara la permanencia en el lugar, la gente volvió a dispersarse hasta dejar el parque en manos de sus habitantes de costumbre, en un final lánguido de la tradicional fiesta de la clase obrera, con un saldo conocido de 34 detenidos, 29 en un CAI del centro y 5 trasladados a la Fiscalía, según datos de la Fundación Comité de Solidaridad con los Presos Políticos. Se presume, por la dimensión de la agresión del Esmad, que hay muchos heridos, pero concretamente se conocen seis casos, uno de ellos de gravedad: un joven que recibió el impacto de una aturdidora en un pómulo.
Primero de mayo comunitario en Moravia
Parte de la comunidad afectada por los desalojos, llevados a cabo en el barrio Moravia, el Centro Social y Cultural Libertario, el colectivo Plano Sur y Periferia Prensa Alternativa, salieron a manifestarse en esta fiesta de la clase obrera desde el barrio Aranjuez, en el nororiente de la ciudad, hasta el barrio Moravia. En esta zona está siendo desalojada por la administración municipal la comunidad para dar paso a la construcción de un parque ecológico.
Con cánticos, chirimía, malabares, a las 10:30am se inició el recorrido, con cerca de 60 personas que iban denunciando la actual situación que vive la comunidad de Moravia, además del reclamo de trabajo digno y vivienda digna.
A la llegada a Moravia, la marcha se concentró en el puente peatonal que conecta con la estación Caribe del Metro. Con sancocho, actos circenses, música y denuncias de los mismos pobladores se desarrolló la jornada.
Las denuncias expresadas tienen que ver con el proceso de desalojos. “Nos están mandando para unas viviendas muy alejadas de la ciudad, en condiciones mucho peores a las que vivimos”, dijo Luis Enrique Ruíz, uno de los pobladores afectados.
Son cerca de 190 familias que están siendo actualmente desalojadas por la administración municipal, según lo cuentan los mismos pobladores. “La otra semana se vendrán más desalojos… hay familias que fueron desalojadas desde hace 4 años, y aún siguen viviendo en apartamentos arrendados, pagados por la alcaldía”.
Las pobladoras y pobladores coincidieron al afirmar que el propósito de la jornada era visibilizar que no tienen empleo y que los pocos empleos que tienen son precarios, y, sobre todo, la necesidad de una vivienda digna. “Necesitamos que reconozcan nuestros derechos”.
Movilización en Bogotá estuvo marcada por agresiones del Esmad
Las marchas en Bogotá se dividieron en tres grupos, una que venía del sector sindical y en al cual participaron algunas organizaciones políticas como el Polo Democrático Alternativo y la Marcha Patriótica, llegaron a la Plaza de Bolívar antes de las 12 del día, desarrollaron un acto político y algunas actividades culturales y antes de la una de la tarde la mayoría de participantes se habían ido para sus casas. En el paso de esta marcha por la calle 19 con carrera 7a se presento un choque con la con el Esmad.
Un segundo grupo llego a la Plaza a la una y treinta de la tarde, encabezado por los “Cabeza Rapada”, con consignas señalando su lucha antifascista y antinazi y de apoyo a la Marcha Patriótica, la mayoría jóvenes vestidos con trajes negros y botas militares.
Finalmente llegó a las dos y media de la tarde la manifestación que venía del sur de la ciudad con habitantes de localidades como Bosa, Techotiba (Kennedy), Usme y Ciudad Bolívar, un grupo cercano a unas 3.000 personas, en su mayoría jóvenes. A esta marcha se le concentro la mayoría del operativo del Esmad y la policía con un hostigamiento permanente que en algunos momentos creó situaciones tensas.
En la plaza tres personas hablaron por un megáfono para señalar los motivos por los cuales los habitantes de este sector de la ciudad se movilizaron en esta fecha “hemos planteado nuestra indignación contra la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio desde el 15 de mayo, que pisotea nuestra dignidad como colombianos, como latinoamericanos…nos movilizamos también por el empleo, por el trabajo digno para los y las jóvenes quienes sufren el flagelo del desempleo y tienen que recurrir al rebusque lejos esta de ofrecerles un salario digno…por la mujeres que son utilizada como estereotipos para la venta de productos…por la soberanía alimentaria ante la política del estado de poner las mejores tierras del país en venta a las transnacionales que solo quieren producir para los grandes mercados y para los agrocombustibles sin reparar el hambre que sufre la mayoría de colombianos”
Esta marcha estuvo acompañada de expresiones artísticas, de gran alegría y hasta por voladores que tronaron en el centro de la plaza haciendo alzar vuelo a centenares de palomas.
El Bolívar de la Plaza testigo mudo de estas marchas, fue vestido de diferentes banderas de cada uno de los movimientos que hizo presencia y finalmente quedo con un antifaz verde y amarillo con la letras U y P en blanco
Así transcurrió el 1º de mayo en la ciudad de Cali
Las calles de Cali se inundaron nuevamente, esta vez del colorido de los sectores y organizaciones sociales y políticas que confluyeron en la histórica marcha del 1º de mayo, día internacional de la clase trabajadora, que congregó alrededor de diez mil personas, entre estudiantes universitarios y de secundaria, sindicatos de la educación, la salud, las centrales CUT, CGT y CTC, el MOVICE, el Congreso de los Pueblos, la Minga de Resistencia Social y Comunitaria, la Marcha Patriótica y el Polo Democrático Alternativo.
La marcha que recorrió la ciudad desde el norte, en la “Antigua Estación del Ferrocarril, hasta el tradicional “Parque de las Banderas”, recorrió la ciudad por aproximadamente 5 horas, durante las cuales se escucharon consignas en contra del recién firmado Tratado de Libre Comercio, del neoliberalismo, de las locomotoras de desarrollo del gobierno del Presidente Juan Manuel Santos y por mejores condiciones sociales y laborales.
Así mismo, una de las voces más sentidas durante toda la marcha, fue la denuncia por el reciente asesinato del líder sindical Daniel Aguirre, sindicalista de la caña de azúcar de la organización “Sinalcorteros”. Los y las sindicalistas, repudia su asesinato y expresan que a pesar del discurso del gobierno Santista, Colombia continúa siendo uno de los países más peligrosos para la actividad sindical. Así lo expresó el presidente de la CUT Valle, Álvaro Vega “El país reclama el derecho a la libre asociación y exigimos garantías para la dirigencia social y sindical del país, llevamos 4 dirigentes sindicales asesinados en el valle del cauca, en lo corrido del 2012 y 7 a nivel nacional, seguimos siendo el país más peligroso del mundo para el ejercicio de la actividad sindical y eso no puede suceder en un país en el que se habla de estado social de derecho y de libertades democráticas”.
La jornada de movilización transcurrió en relativa tranquilidad durante casi todo su recorrido. Solo hasta su último tramo, se dio la expresión de algunos manifestantes frente a las entidades bancarias con grafitis y pintura, actos que ocasionó choque con la policía que protegía estos establecimientos, ya que la reacción de la fuerza pública ante la protesta, fue arrojar bombas de estruendo, las cuales alcanzaron a afectar a varias personas.
Este hecho también fue motivo de denuncia, ya que según varios de los marchantes y defensores de derechos humanos, la policía procedió de manera exagerada ante un reducido grupo de personas que protestaban contra los bancos. Además, algunos de los artefactos lanzados por los agentes, contenían las llamadas “recalzas”, elementos metálicos que mezclados con el material explosivo son altamente peligrosos, de hecho uno de los manifestantes tuvo que ser llevado a un centro médico, ya que fue alcanzado por estos elementos.
Según el informe de organizaciones de derechos humanos del Valle, cómo el de la Fundación Comité de Solidaridad con los Presos Políticos – FCSPP, por estos hechos fueron detenidos doce manifestantes, de los cuales 10 ya se encuentran en libertad. Los otros dos, serán judicializados por la supuesta agresión a un oficial de la Policía Metropolitana del Valle.
Como en los últimos años, una de las características más marcadas de esta manifestación, es la gran cantidad de expresiones políticas y sociales recurriendo a diversas maneras de expresión, que coinciden en el rechazo a las políticas del actual gobierno, ya que incrementa la desigualdad social.
Al final de la movilización, los y las manifestantes finalizaron su marcha en un espacio donde las diferentes centrales obreras y los procesos de otros sectores, saludaron la conmemoración.
