Aproximadamente a las 7 de la mañana del día de hoy, 27 de octubre, el Esmad ingresó violentamente al Resguardo indígena de Cañamomo Lomaprieta, ubicado a media hora del municipio de Río Sucio, departamento de Caldas, so pretexto de llevarse a dos policías que se encontraban retenidos por la comunidad, que serían entregados voluntariamente a la comunidad internacional, a los organismos de control y a organizaciones defensoras de derechos humanos, tal y como se había definido mediante acta escrita por los involucrados, el día de ayer, lunes 26 de octubre.
Durante su ingresó, el Esmad que además de desconocer los acuerdos, no considero la afectación ni de niños, de ancianos, esparció gases lacrimógenos que terminaron afectando a la comunidad, en especial a los niños que a esa hora se dirigían a la guardería infantil y al colegio, al gobernador indígena y a la defensora comunitaria.
Todo empezó el pasado lunes, cuando 4 hombres vestidos de civil y fuertemente armados ingresaron a la cancha de fútbol de la comunidad Iberia, perteneciente al Resguardo Indígena de Cañamomo Lomprieta y en momentos en que se desarrollaba un partido, esposaron y tiraron al piso al José Estebán Tabasco Trejos, sin ni siquiera explicarle antes el motivo de su acción.
Al ver lo que estaba sucediendo, la comunidad se interpuso, frente a lo cual los hombres armados le dispararon al joven y lanzaron luego tiros al aire advirtiéndoles a los indígenas presentes que si se movían, los mataban. Incluso en ese mismo instante fue herido un anciano de 84 años, quien reclamaba por la libertad del joven, en momentos en que éste era arrastrado fuera de la cancha.
No obstante y a pesar de las amenazas de los sujetos, éstos fueron retenidos por la comunidad indígena, para así poder verificar la identidad de los mismos, quienes en últimas se identificaron como agentes del Gaula de la Policía de Caldas, a saber, subintendentes Hever Mauricio Torres Pavas y Andrés Fernando Meza Meza, y los Patrulleros Jorge Norbey Arcila Orozco y Víctor Alfonso Buenaños Mosquera.
La comunidad es clara en afirmar que este tipo de irrupciones a su comunidad por parte de la policía, es una falta de respeto a sus leyes a su territorio y a su autonomía, violatoria de los derechos humanos de los indígenas del Resguardo.
Al finalizar la tarde y luego que se le pidiera al mayor Mario Suárez Lozano, Comandante del Distrito IV de la Policía, con jurisdicción en Riosucio que desarmara sus hombres y entregara las armas, en momentos en que se procedía a la entrega pacífica de los mismos, uno de ellos huyó, lo que generó nuevas molestias en la comunidad que decidió finalmente entregar a los hombres el día de hoy a las autoridades competentes, con el fin de que se les garantizara una investigación eficaz por los hechos.
No obstante esto no se cumplió… el Esmad ingresó y arrasó. A esta hora, la comunidad se encuentra reunida en asamblea permanente, tomando decisiones frente a los hechos que vinieron a interrumpir su tranquilidad el pasado lunes.
El Pueblo Indígena Embera Chamí que es beneficiario de Medidas Cautelares, otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos – CIDH, desde el año 2002, lo único que pide es que se le respeten sus derechos y que cese la persecución a sus miembros.