Desde muy joven había participado en espacios político – organizativos del Movimiento Indígena en Jambaló, y tan sólo a sus 21 años de edad, cuando el Ejército Nacional segó su vida, ya había ocupado cargos importantes en el Cabildo Indígena. Su detención, tortura y ejecución extrajudicial ocurrieron el día 1 de febrero de 1988.
Cabildante y Gobernador del resguardo indígena de Jambaló, en el departamento del Cauca, se dedicaba a la agricultura al igual que los demás miembros de su comunidad y a la defensa del territorio.
Ese día, como resultado de un informe de inteligencia militar, dos soldados del Ejército Nacional, Cabo Camacho Riaño comunicó al Cabo Evert Ospina Martínez, se dirigieron a la residencia del señor Germán Escué Zapata y sus familiares, ingresaron a la vivienda, registraron la misma y, mientras le preguntaban dónde estaban las armas y lo calificaban de guerrillero, lo golpearon y lo condujeron a la zona montañosa donde Cabo Camacho Riaño que no lo matara, pero el Cabo retrocedió y le disparó varias veces causándole la muerte. Al llegar al campamento, los soldados que presenciaron los hechos fueron orientados por sus superiores a decir que durante el traslado se había producido un “hostigamiento” con un grupo guerrillero y que Germán Escué había muerto en medio del fuego cruzado.
El 1 de febrero de 2009 el Estado colombiano pidió perdón a la comunidad Nasa por estos hechos, como parte de la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos que estableció la responsabilidad del Estado en este crimen. La sentencia también fijó una serie de medidas de reparación consistentes en fortalecer la economía de su comunidad, una causa a la que Germán Escué Zapata dedicó su corta vida.
Sentencia Corte Interamericana de Derechos Humanos, caso Germán Escué Zapata: http://www.corteidh.or.cr/docs/casos/articulos/seriec_165_esp.pdf