• En las instalaciones de la Escuela Logística y el Batallón de Contrainteligencia del Ejército (antigua Brigada XX) se reportaron los primeros hallazgos tras una serie de excavaciones que arrancaron en febrero pasado. CAMBIO habló con José Antonio Movilla, hijo de Pedro Movilla, dirigente del PCC que está desaparecido desde 1993.
• “Después de este proceso que ha tardado más de 32 años y que lleguemos a este momento en que efectivamente las instituciones están en la búsqueda física ya del cuerpo de Pedro Julio Movilla Galarza, para nosotros es una cuestión muy significativa. En febrero empezamos a hacer estas diligencias, que son carácter reservado y con unas características muy delicadas”, indicó.

Por Alejandra Bonilla Mora/ Cambio

“Han sido 32 años en los que no hemos tenido una respuesta. Hoy estamos empezando a concretarla, al menos en el terreno. Estamos en un lugar donde pudo haberse dado una inhumación. Abrir cada una de las trincheras es muy fuerte en lo psicológico. Es estar con los deseos de cavar con la pala”.

José Antonio Movilla quisiera, literalmente, ponerse a cavar él y concretar la esperanza que palpita en el pecho: encontrar a su padre, Pedro Julio Movilla Galarcio, dirigente del Partido Comunista Marxista Leninista y del Frente Popular que desapareció el 13 de mayo de 1993, minutos después de dejar su hija en el colegio en el sector de la avenida Primero de Mayo, en Bogotá.

Pedro Movilla tenía 43 años cuando fue desaparecido forzadamente, los mismos que hoy tiene José Antonio, quien desde febrero asiste con sus representantes legales a diligencias de excavación que está haciendo la Jurisdicción Especial para la Paz y la Fiscalía en las instalaciones de la antigua Brigada XX del Ejército en la localidad de San Cristóbal en el sur de Bogotá, en donde hoy funcional Escuela de Logística y el Batallón de Contrainteligencia del Ejército Nacional.

Esa sede militar, que es de gran tamaño, es objeto de medidas cautelares de la JEP desde el 12 de septiembre de 2024, una petición que hizo el Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo que representa a la familia Movilla, luego de que un exintegrante de esa unidad militar hiciera una revelación histórica: que en esa unidad militar fue enterrado el líder político de izquierda, luego de ser torturado y asesinado por uniformados.

La pista la dio el sargento retirado del Ejército Nacional José Leonario Dorado Córdoba en una declaración reservada ante la JEP: “En varios vehículos abordaron a la fuerza al señor Pedro Movilla sobre la avenida Primero de Mayo con 68, lo condujeron hacia la escuela logística instalaciones del Batallón de contrainteligencia 1 y ahí lo interrogaron mediante acciones violentas de tortura y se les murió y en ese sitio lo enterraron”.

Desde que se ordenó la medida cautelar, la JEP y el Grupo Interno de Trabajo de Búsqueda, Identificación y Entrega de Personas Desaparecidas de la Fiscalía (GRUBE) han actuado con mucho sigilo. La razón es que todos los involucrados quieren evitar a toda costa que se afecte la búsqueda y las excavaciones que están haciendo y quieren mantener el trabajo que se está haciendo intacto.

La noticia de que ya se encontraron los primeros restos óseos llegó hace unos días, con sorpresa por ese mismo sigilo con la que se está haciendo la tarea. Hasta el momento, se sabe que hay un hallazgo de restos que 0son humanos y nada más. José Antonio Movilla, con ese mismo sigilo, destacó en diálogo con CAMBIO la labor técnica de la JEP y de la Fiscalía.

El impacto es fuerte, agrega José Antonio, quien enfatiza en que lo esencial es la búsqueda, porque no han parado de hacerlo, porque quiere encontrar a su padre: “Tenemos la esperanza de que esto arroje resultados importantes”, agregó.

¿Estará allí Pedro Movilla?

Desde el mismo día de la desaparición, la esposa de Movilla la dio a conocer a la Procuraduría y la Fiscalía y en ese momento se estableció que, en la antesala del crimen, la Dirección Nacional de Inteligencia y la Brigada XX del Ejército Nacional lo seguía. En 2022, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) declaró la responsabilidad internacional del Estado de Colombia por la desaparición forzada y en esa decisión se ordenó a Colombia adelantar las labores de búsqueda que permitieran establecer su paradero o encontrar su cuerpo.

En julio de 2024, la JEP requirió a la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas para que le explicara un abordaje forense previo realizado por esa entidad en diciembre de 2023 y en junio de 2024. La unidad precisó que el testimonio de Dorado es el único que tienen sobre la posible localización del cuerpo de Movilla y que este hizo indicaciones, por videollamada, en las intervenciones para ayudarles a encontrar el lugar exacto. Esa primera información no terminó con hallazgos de interés forense.

Otras víctimas de la Brigada XX

Ahora se empieza a concretar la esperanza de búsqueda que por tanto tiempo ha estado latente en las víctimas. Víctimas que no serían exclusivamente los familiares de Pedro Movilla, pues la sede de la Brigada XX es infamemente recordada por múltiples crímenes cometidos por sus integrantes en contra de personas que hacían parte de la Unión Patriótica y de lo que “oliera a izquierda” en los años ochenta, cuando funcionaba a pleno la política del enemigo interno.

El sargento retirado Dorado dijo ante la JEP, pero también en entrevista con Helena Urán en CAMBIO, que allí se enterraron a más personas. Dorado mencionó a Irma Franco, una de las integrantes del M-19 que participó en el ataque al Palacio de Justicia, señalando que ella fue asesinada en el Batallón de Contrainteligencia 1, en la Escuela Logística, y que luego sus restos fueron trasladados.

También ha hablado del defensor de derechos humanos Alirio de Jesús Pedraza, que hacía parte desde 1982 de la Fundación Comité de Solidaridad con los presos políticos. Dorado dijo que Pedraza fue desaparecido forzadamente por integrantes de la Brigada XX y que fue llevado a la Escuela de Logística, en donde fue torturado y asesinado.

El caso de Movilla recuerda la persecución infame a la izquierda colombiana en su momento. La sentencia de la Corte IDH por su desaparición detalla testimonios de otros líderes sindicales que fueron torturados mientras le preguntaban por el paradero de Movilla, así como el hecho que se encontró documentación de la Brigada con anotaciones sobre él, sobre su rol en el PCC, calificándolo como “miembro de grupo armado” y “adiestrador delictivo” del “Ejército Popular de Liberación – disidente”.

“La Procuraduría hizo constar la existencia en la Dijín de un cuadernillo con información sobre Pedro Julio Movilla Galarcio, en el cual se brindaban detalles sobre su aspecto físico, el nombre de su esposa, su lugar de trabajo, el vehículo en el que se desplazaba y los lugares que frecuentaba”, dice la sentencia.

Mientras tanto, Movilla, que no era parte de ningún grupo ilegal, fue desaparecido cuando dejaba a su hija Jenny en el colegio Kennedy y testigos presenciaron cómo lo metieron por la fuerza en un taxi. Fue la última vez que alguien lo vio con vida. Ahora, será la ‘pala’ o mejor las herramientas cuidadosamente usadas por los equipos forenses las que -ojalá- revelen la verdad.

Artículo publicado originalmente en: https://cambiocolombia.com/poder/deseos-de-tomar-la-pala-la-esperanza-de-los-familiares-de-pedro-movilla-tras-hallazgo-de?